¿Qué es el sistema Montessori?
El sistema Montessori se desarrolló paulatinamente a partir de 1907, año de la fundación de la primera Casa de Niños, en San Lorenzo, suburbio de Roma. La Dra. Montessori sostenía que ningún ser humano puede ser educado por otra persona. Pensaba que el ser tiene una inclinación innata a hacer las cosas por sí mismo, a aprender lo que necesita, a desarrollarse íntegra y sanamente por sus propios medios, siempre y cuando esté en un ambiente preparado para ello. Ella sostuvo que cuando la educación es dirigida, el pequeño no logra desarrollar ni su potencial innato ni su independencia. Sostuvo también que la educación infantil debe ser definida respetando los intereses y las necesidades de los niños, y que toca al adulto permitir y cultivar su inclinación natural de aprender. Para lograrlo, indicó una y otra vez, la clave es el respeto a la libre elección del individuo.
Precisando, según María Montessori, el propósito de la educación, especialmente durante la infancia, se alcanza de dos maneras:
1) Permitiendo a cada niño actuar y aprender por sí mismo. Es decir, no obligándolo a llevar a cabo actividades elegidas por otro.
2) Guiándolo a perfeccionar todas las aptitudes que pone en juego cuando elige una actividad.
El trayecto desde la temprana infancia hasta el inicio de la adolescencia se organiza por niveles, no por grados. El nivel de los más pequeños se llama Comunidad Infantil y abarca –para el caso de Unión Montessori- de 1 a 3 años. Le sigue Casa de Niños, que corresponde a preescolar. Al tercer nivel se le denomina taller, que se subdivide en dos: Taller 1 (1º a 3º de primaria) y Taller 2 (4º a 6º de primaria).
En la práctica, la organización de un ambiente Montessori se compone de un espacio provisto de materiales de desarrollo organizado por áreas, según el nivel (p.ej. vida práctica, sensorial, lenguaje, matemáticas, geometría, áreas culturales). Cuando los materiales responden a las inclinaciones de los niños conducen la atención hacia la concentración. Este es un aspecto fundamental del método. La concentración es el vehículo que lleva al niño a perfeccionarse. Aquel niño en el que la atención salta de un objeto a otro sin cesar no tiene posibilidad de organizar su experiencia, y de acuerdo con Montessori, tiende a vivir en el caos. Por el contrario, la concentración o atención sostenida, lleva al niño al gusto por el reto, gusto por aprender.
El desarrollo es propiciado por la Guía, según los materiales que vaya presentando a los niños y por las reglas de convivencia que rigen un ambiente. Para cada área en el ambiente y para cada nivel Montessori existen un número determinado de presentaciones que la Guía debe dar a los niños. Las presentaciones deben ser repetidas posteriormente por el niño para llegar a dominarlas.
Cuando un niño domina una presentación está listo para una presentación que encierre un reto mayor. Gracias a la observación y al seguimiento de cada niño que la Guía lleva en sus registros, conoce en qué punto de su desarrollo está en las diferentes áreas. Por tanto, puede definir qué presentaciones debe dar a continuación. Así, la vida en un ambiente discurre entre niños llevando a cabo acciones auto-iniciadas, y aquellos que trabajan con la Guía en una presentación.
Para ayudar en el trabajo de la Guía existe la figura de la asistente. La asistente es un segundo adulto dentro del ambiente que tiene la tarea fundamental de vigilar y guardar el orden y la fluidez, de manera que la Guía pueda dar presentaciones. La asistente, entonces, es responsable de observar que los niños que necesiten algún apoyo lo reciban.
La sana relación y colaboración entre Guía y asistente es requisito indispensable para que un ambiente Montessori funcione adecuadamente.
Ambiente preparado: es lo que en la educación tradicional se conoce como Salón de Clases. Se organiza por áreas en función de las necesidades e intereses de los niños.
Concentración: cuando la atención del niño se dirige a la exploración de algún material o fenómeno. Interrumpir la concentración es contrario al desarrollo del niño.
Consecuencia: el curso de eventos que deriva de las conductas realizadas. En la educación tradicional se les llama premios y castigos.
Guía: responsable de un ambiente. La Guía es lo que en la enseñanza tradicional es la maestra.
Límites: fronteras del comportamiento correcto.
Materiales de desarrollo: conjunto de objetos que mediante su uso ayudan a desarrollar el potencial innato.
Normalización: estado de armonía y fluidez que alcanza un ambiente cuando cada niño es responsable de sí mismo y se mantiene trabajando en alguna actividad de su interés.
Presentación: trabajo individualizado, en pequeño grupo o colectivo que hace la Guía para modelar una conducta y/o explicar la utilización correcta de un material.
Records: registro de cada alumno que lleva la Guía respecto al conocimiento y grado de dominio de las presentaciones ofrecidas.
Reto: elemento fundamental para captar el interés y la concentración del niño. Componente de una actividad que es accesible pero no fácil para un niño.
